ORDEN DE LA MERCED (Mercedarios)
Se fundó la Orden de la Merced, en la catedral románica de Barcelona, el 10 de agosto de 1218. Su Fundador, San Pedro Nolasco, con un grupo de laicos catalanes, y con el apoyo del joven Rey Jaime I, y del Arzobispo Berenguer de Palou, llevó a cabo la creación de una Orden Laical para la redención de cautivos cristianos.
CONFIRMACIÓN DE LA ORDEN
Gregorio IX, desde Perusa, confirmó solemnemente la Orden de la Merced el 17 de enero de 1235. Tuvo Constituciones propias de una Orden Laical, y siguió la Regla de San Agustín.
CONVERSIÓN EN ORDEN CLERICAL
En Asamblea electiva, los 259 frailes mercedarios -laicos y clérigos- manifiestan su deseo mayoritario en elegir a un General clérigo, en 1317, un siglo después de la fundación. Raimundo Albert, nuevo General, mandó redactar nuevas Constituciones (1327). Desde entonces, la Merced es canónicamente Orden clerical, aunque admita "Hermanos seglares como Religiosos", en igualdad fraterna.
CARISMA LIBERADOR
Se calcula que la Orden de la Merced, hasta vísperas de la Revolución Francesa, redimió unos 70.000 cautivos. Los bienes que poseía eran, en realidad, bienes para la redención. En virtud de su "cuarto voto", cada mercedario profesaba "quedar en rehenes, si fuere preciso, en lugar de un cautivo, sobre todo si su fe peligraba". Hoy sigue vigente este cuarto voto.
Actualmente, en las llamadas "nuevas formas de cautividad", sigue ocupándose, sigue ocupándose, preferencialmente, de los Refugiados, exiliados, inmigrantes, prisioneros, "Meninos de rua" (Brasil), y de aquellos que están faltos de libertad, o cuyos derechos fundamentales son conculcados.
Ya desde el segundo viaje colombino, iba, al menos, un mercedario -según Mártir de Anglería- como Capellán del Almirante. Desde 1514 existe un convento en santo Domingo. Después se crean ya Cuatro Provincias que, a su vez, se organizan en Doctrinas. Dos características propias:
1) La Merced colaboró, con la plata que llegaba de América, a la redención de cautivos.
2) Logró que arraigase profundamente la devoción a María de la Merced.
VIDA CULTURAL
Baste decir que, históricamente, la Merced tuvo catedráticos en las más célebres Universidades de España, Francia y América. Entre los personajes más destacados figura el famoso dramaturgo TIRSO DE MOLINA (Fray Gabriel Téllez), autor de más de 400 comedias, "Cigarrales de Toledo"(1624), "Deleitar aprovechando"(1635), "Historia de la Orden", manuscrita y editada en 1974 en dos gruesos volúmenes. Otros: Alonso Remón, Interián de Ayala, cofundador de la Real Academia de la Lengua (siglo XVIII), Juan Suárez de Godoy, Francisco Zumel (Teólogo salmantino del siglo XVI), Jerónimo Pérez, profesor de los primeros Jesuitas, Gaspar de Torres y Melchor Rodríguez de Torres, Obispos y místicos, escritores ambos, que trataron a Santa Teresa, etc.
PROVINCIA DE LA MERCED DE CASTILLA
Tiene su Curia provincial en la calle Belisana, 2 - 28043 Madrid. Teléfono: 91 300 29 72 / 91 300 29 02. Fax: 91 300 29 94. Regenta asimismo la parroquia, recientemente remodelada de Santa María de Cervellón. En Madrid -donde existen 3 comunidades mercedarias-, la Basílica Hispanoamericana de la Merced es también parroquia, de gran capacidad, y con gran movimiento pastoral. Desarrolla su actividad pastoral, de formación vocacional y carismática en 15 comunidades en España. En el extranjero, tiene una Vicaría, la Vicaría del Caribe de la Orden de la Merced (con 4 comunidades y numerosas "capillas" adjuntas a su labor apostólica; 3 en Puerto Rico, y 1 en Santo Domingo). Con fecha de 03 de enero de 2007 era erigida canónicamente "Provincia Mercedaria de Brasil" la Vicaría de Brasil, perteneciente hasta este momento a la Provincia Mercedaria de Castilla. Finalmente, desarrolla su labor misionera en África, con una Delegación, en Camerún. También en África, por vez primera en su larga historia, existen vocaciones mercedarias. El 22 de julio de 1999 se inauguró la nueva casa de formación “Saint Pierre Nolasque” en Yaoundé, con postulantado, noviciado y estudiantado. El día 6 de septiembre de 2008 se instala la primera comunidad en Nkol Afeme-Yaoundé, tercera Casa mercedaria en Camerún, que, a partir de esta fecha, pasa a ser Casa de Formación de Estudiantes profesos (Estudiantado mercedario con presencia mercedaria en África: Provincias de Aragón, en Mozambique; Castilla, en Camerún; y Chile, en Angola). El día 02 de octubre de 2011 se celebra la instalación oficial de la Orden Mercedaria en Sangmelima-Camerún. Ya anteriormente, el 5 de junio de 1997, llegan a Yaoundé, los PP. Mercedarios: Pablo Ruiz de Escudero y Carlos Mª Olivera para hacerse cargo de la parroquia de La Briqueterie. Es una de las grandes esperanzas de la Provincia de Castilla en África.
CULTURA
Se valora el estudio y especializaciones de los religiosos. Algunos son Catedráticos de Universidad; otros se consagran a la investigación. Existen dos revistas: "Estudios", de investigación y alta divulgación; y "Caminos de liberación", que sensibiliza e informa de lo carismático, de modo preferencial, y organiza "Campañas anuales de ayuda a Iglesias necesitadas”. Además de la Biblioteca curial , especializada en libros y manuscritos de la Orden -pequeña, pero interesante-, en el Monasterio de Poio (Pontevedra) se mantiene una gran Biblioteca, con más de 100.000 volúmenes. Allí se creó una "Escuela de Mosaico", bajo la dirección del Maestro Machourek, y existen varias obras maestras. También cedieron sus cuadros para establecer un "Museo" el mismo Machourek y esposa; y parte de la obra pictórica otro artista, García Lema. Actualmente se tiene casi su obra completa, adquirida en parte a sus herederos. El doctor Bouzo, y otros, han hecho donaciones de obras de interés, que acrecientan el valor cultural del Monasterio. La Provincia tiene actualmente algunos religiosos especializado en teología, filosofía, psicología, sociología, historia, Biblia, literatura, música y poesía. En los Colegios, tanto en España, como en Puerto Rico, se inculca el amor a las ciencias y artes. En la actualidad algunos jóvenes religiosos se especializan en Educación Social para trabajar a favor de los nuevos cautivos de nuestro tiempo.